En las últimas semanas han habido un par de anuncios interesantes correspondientes a los pagos, uno de los cuales tiene un significado muy interesante, y otro que simplemente sirve como un recordatorio de que la innovación en materia de pagos esta casi terminada, pero aún estamos muy lejos de un método fácil, simple y multi-factor de autenticación para los pagos en línea como físicamente en las tiendas.
Simple, fácil, en línea y en las tiendas debe ser el estándar para cualquier nueva solución de pago, y hasta ahora todo lo que hemos visto es una medida a medias en el mejor de los casos. El excelente servicio de Apple Pay no puede usarse cuando la compra es en un sitio web cualquiera desde un ordenador portátil. A todo el mundo le gusta recibir un mensaje de texto de PayPal para autorizar una compra en línea, pero esos compradores también se fastidian cuándo en sus celulares no cuentan con buena señal y pasan varios minutos esperando completar una transacción.
Uno de los comunicados de prensa fue el de SmartMetric, una firma biométrica que ha anunciado una tarjeta de crédito con un escáner de huellas dactilares integrado en la tarjeta. Esto es significativo porque la tarjeta queda lo suficientemente delgada como para seguir siendo utilizadaen los cajeros automáticos existentes pues no requiere ningún hardware nuevo. El escáner de huellas digitales desbloquea la tarjeta de modo que se puede utilizar, y funciona como una tarjeta con chip.
El otro anuncio se produjo a partir de la empresa Fitbit que ha adquirido la propiedad intelectual de pagos Wereables de la empresa Coin.Ellos prometieron revolucionar el mercado de los pagos. Coin prometió una tarjeta para administrar todas las demás. Una tarjeta que se puede utilizar para cargar todas sus tarjetas de crédito que una persona posee y en el momento de la compra poder sleccionar la que quiere utilizar en eses monento.
Los productos de Fitbit se ven cada vez más como relojes inteligentes y no es ninguna sorpresa que hayan incursionado en las tecnologías de medios de pago. Será interesante ver si Fitbit puede adaptar sus dispositivos a llevar la tecnología de Coin que ha dejado de vender sus famosas tarjetas Coin 2.0.
Entonces, nos preguntamos ¿qué otras innovaciones de pago están ahí fuera, y tampoco ofrecen ninguna alternativa posible al Chip y la Firma Digital?
SmartMetric y Coin no son las únicas empresas que experimentan jugando con la propia tarjeta. A medida que los productos electrónicos se hacen más pequeños y las baterías se mejoran su duración, es cada vez más posible fabricar tarjetas mucho más inteligentes de lo que son hoy en día. Coin ha comenzado a trazar ese camino y SmartMetric promete una tecnología de huellas digitales. Por otro lado MasterCard y los inversores de Dynamics, Inc. con sus tarjetas inteligentes, están empujando a una solución de "tarjeta interactiva".
Con la tarjeta de Dynamics / MasterCard, los consumidores ingresan su PIN directamente en la tarjeta, no para validar una transacción, pero al igual que la huella dactilar para desbloquear la msima, con el agregado de generar el uso del PIN de una sola vez al momento que entra la tarjeta en el punto de venta para autorizar el pago. El valor aquí es que usted podría utilizar el mismo para compras en línea, siempre y cuando el comerciante tenga la capacidad de tomar ese PIN generado y pasarlo a lo largo del procesador de pagos. Esto ayudaría a validar que la persona que hace la compra en línea en realidad tenga la tarjeta físicamente en la mano.
Pero, todo esto lo que hace es aumentar las dependencias de los consumidores en seguir llevando consigo sus tarjetas, en lugar de sacarlas de la cartera o de la transacción de compra por completo. Y ahí es donde entra en juego la biometría. El problema con los datos biométricos es que a menudo puede requerir un hardware especial. Apple Pay es un ejemplo de ello (No hay problema cuando se utiliza el teléfono, el pero las MacBook, no poseen un escáner de huellas digitales).
Sin embargo, hay dos tendencias que amenazan con perturbar este mercado. La primera es la creciente ubicuidad de los escáneres de huellas digitales. La firma de investigación Tractica estima que existen alrededor de 100 millones de dispositivos (smartphones y tablets) desplegados en el mercado hoy en día con escáneres de huellas dactilares en ellos, y cree que la cifra será superior a mil millones para el año 2021. Se trata de una tecnología que la gente utiliza cada vez más, gracias a su creciente inclusión en los teléfonos móviles.
Otros proveedores todavía están tratando de romper este enigma de hardware en el mercado. Biyo es un proveedor de soluciones de escaneado de palmas de la mano. Las huellas digitales pueden tener una connotación negativa para algunas personas, y hay un montón de vídeos por ahí de como piratear las msimas. Pero las palmas son más grandes, y mucho más difíciles de falsificar porque la tecnología utiliza la identificación de la red única de las venas que se encuentran en la palma de su mano, en lugar del conjunto único de remolinos en la piel. Lo malo es, que requiere un lector de palma especial, uno que no se distribuye de forma nativa en cualquier dispositivo informático de los consumidores de hoy. Los comerciantes tendrían que implementar un nuevo hardware, y los consumidores tendrían que adquirir uno para sus casas o trabajos o visitar a los comercios para establecer la palma de la mano para establecer la seguridad. Por el momento no es muy conveniente.
Lo que nos lleva a las opciones donde el hardware es ya omnipresente, por ejemplo, en las cámaras. Todas las notebooks que se venden en el mercado ya vienen con una de ellas. Las cámaras permiten dos tipos de datos biométricos, (siempre que el software lo permita): el reconocimiento facial, y el escaneo del iris.
Google ha estado haciendo incursiones en el reconocimiento facial con su Hands Free Payments que anunció a finales del año pasado. Una empresa en Finlandia llamada Uniqul también está desarrollando pagos de reconocimiento facial.
En Japón, Docomo conjuntamente con Fujitsu ofrecen escaneo basado en el iris para desbloquear las aplicaciones y los pagos.
Estas dos últimas soluciones utilizan tecnologías de cámaras existentes. Esto representaría poca o ninguna inversión para los comerciantes al momento de implementar este tipo de soluciones en sus tiendas.
Y, sin embargo, a pesar de todas estas innovaciones, todavía no se siente ninguna fascinación desde el lado del consumidor. La autenticación de pago es cada vez más sofisticada, y la necesidad de proteger las compras contra el fraude sigue siendo una cuenta pendiente. Seguimos esperando el día en que la compra sea simple, fácil, en línea y segura......
Fuente: forbes.com